Oscar Sarmiento
Cuando resbalan los caballos en la calle
en su vientre rojo
brillan los focos de los autos.
Ni sonidos ni chispas conservan los cascos
y los carreteros
lloran en sus carretas.
Esas ancas no recibirán un látigo más
ni una sola luz de semáforo
esas pupilas.
Nada esas crines
esas herraduras.
En la calle
acaba el cuerpo de los caballos
con marcas de correas
en el cuello.
Dos cavalos
Quando escorregam os cavalos pela rua
nos seus ventres vermelhos
brilham os faróis dos carros.
Nem sons nem faíscas conservam os cascos
e os caminhões
choram em suas estradas.
Estas ancas não receberão um chicote mais
nem uma só luz de semáforo
estas pupilas.
Nada estas crinas
estas ferraduras.
Na rua
acaba o corpo dos cavalos
com marcas de cintos
no pescoço.
Ilustração: davincigallery.net
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